MI OPINIÓN
MI OPINIÓN
Quizás seas de la opinión de que hay mucho alarmista pronosticando el fin del mundo, y crees que no es para tanto, que nuestro planeta ya ha pasado por situaciones como esta y debido a circunstancias naturales, que no se conocen aún todos los mecanismos que regulan las condiciones medioambientales, y no te faltará parte de razón.
Si nos conformamos con esperar, quizá podamos seguir imitando a las avestruces, o tal vez podamos empezar ya a tomar medidas para corregir una situación que sabemos que no es idónea: la emisión exagerada de dióxido de carbono a la atmósfera.
Este año vuelve a ser año del Niño, ese fenómeno que se viene repitiendo aproximadamente cada cuatro años y que se refleja, entre otras cosas, en el calentamiento prolongado de la temperatura del agua marina de una forma que, en ocasiones, como pasó con el del 98, tuvo un efecto devastador en los corales del Índico. Maldivas, desde entonces, no es sino un triste reflejo de lo que era.
Este año el efecto se está notando en el Indopacífico. Malasia ya ha cerrado al buceo algunos de sus arrecifes. Yo he estado buceando en Komodo, que es una zona de Indonesia que debería estar menos afectada que otras por su proximidad con las aguas más frías del noreste del Índico, y se notaban claramente los efectos del “blanqueamiento” de corales y anémonas. Muchas anémonas, y de forma destacada las Heteractis magnifica, habían perdido ya el color. Algunos corales presentaban manchas blancas o más bien alguna mancha de color en el blanco generalizado. Aunque el efecto aún no es irreversible, no deja de ser preocupante.
Es cuestión de todos empezar a corregir esto, no sólo de los gobiernos o de las grandes multinacionales. Plantéate la próxima vez que vayas a encender el aire acondicionado o ir en coche adonde puedes ir andando o en transporte público, si quieres ser una avestruz o un ser humano consciente de las consecuencias de sus acciones, de las que se espera que sea responsable.
¿No crees en el calentamiento?
viernes 13 de agosto de 2010